Luanda - El ministro de Relaciones Exteriores, Téte António, defendió, este martes, en las Naciones Unidas, un enfoque multilateral e integrado como opción estratégica para la lucha eficaz contra el terrorismo.
El ministro defendió esta posición durante el Debate Abierto del Consejo de Seguridad (CS) de las Naciones Unidas sobre terrorismo, liderado por África y centrado en el Desarrollo.
El enfoque pretende fortalecer el liderazgo africano e implementar iniciativas antiterroristas.
En la ocasión, afirmó que el Gobierno de Angola sigue con gran preocupación la propagación del terrorismo y del extremismo violento en diversas regiones del mundo.
Esto, según el ministro, se debe a que comprometen la implementación de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible y la Agenda 2063 de la Unión Africana (UA).
Téte António añadió que el terrorismo es un gran desafío para la paz y la seguridad internacionales y representa una de las amenazas existenciales más peligrosas para cualquier país.
Para mitigar los riesgos, dijo que es esencial promover la buena gobernanza, combatir la corrupción, fortalecer las instituciones del Estado y establecer sistemas de alerta temprana.
Dijo también que “hoy existe consenso en que el terrorismo representa un fenómeno complejo que atraviesa todas las regiones del planeta, la más grave amenaza a la paz y la seguridad mundiales”.
Para el ministro, esto socava los valores y principios fundamentales del siglo XXI, incluidos el desarrollo sostenible, la democracia, los derechos humanos y las libertades fundamentales.
Reiteró que Angola defiende la pertinencia de implementar las decisiones de la 16ª Sesión Extraordinaria de la Asamblea de Jefes de Estado y de Gobierno de la UA sobre Terrorismo y Cambios Inconstitucionales de Gobierno, celebrada en Malabo, Guinea Ecuatorial.
Este evento, realizado por propuesta del presidente João Lourenço, analizó las causas y adoptó medidas para prevenir y combatir estos dos flagelos en el continente.
Recordó que, en esa ocasión, los dirigentes africanos subrayaron la necesidad de aunar esfuerzos a nivel regional y continental para combatir el terrorismo y la violencia extrema.
Entre ellas, explicó Téte António, está la materialización del Plan de Acción para la Lucha Robusta contra el Terrorismo, un mayor intercambio de información y el fortalecimiento y creación de capacidades integradas del Centro Antiterrorista de la UA.
El jefe de la diplomacia angoleña defendió que las acciones contra el terrorismo deben ser apoyadas con recursos financieros sostenibles y apoyo técnico y logístico.
Destaca que estas acciones pueden lograrse mediante el aumento de las sinergias entre la ONU y la UA, en particular en la movilización de fondos en el marco de la implementación de la Resolución 2719 sobre la financiación de las operaciones de paz lideradas por la organización continental.
Señaló que la situación en África es particularmente crítica, según el Índice Global de Terrorismo 2024.
Según el ministro, el epicentro del terrorismo se ha desplazado de Oriente Medio a la región del Sahel central, en África subsahariana, y ahora es responsable de más de la mitad de todas las muertes causadas por esta plaga.
“Los grupos terroristas operan con mayor frecuencia en el norte de África, el Sahel, África central, el Cuerno de África, África oriental y África meridional, en particular en la región de Cabo Delgado en Mozambique.
Con ello, argumentó, provocan un elevado número de muertos, mutilaciones, desplazados y refugiados, y empeoran las condiciones de hambre, miseria y pobreza de miles de ciudadanos.
Subrayó, por otra parte, que el terrorismo tiende a desalentar la inversión privada y a fomentar la emigración de jóvenes africanos a otras partes del mundo.
Téte António agregó que el fenómeno afecta el desarrollo económico y social del continente y las perspectivas de bienestar de las personas.
Otra preocupación del Gobierno angoleño, según el Ministro de Asuntos Exteriores, es la explotación de zonas de conflicto por terroristas, como es el caso de las ADF, que operan en el este de la RDC.
También dijo que la tendencia de los grupos terroristas a migrar hacia las costas del océano Atlántico tiene graves consecuencias, como el agravamiento de la piratería marítima en el Golfo de Guinea.
El jefe de la diplomacia angoleña destacó la necesidad de fortalecer los mecanismos existentes, como la Comisión del Golfo de Guinea, así como la Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur, la Cooperación de los Estados Africanos Atlánticos y la Asociación para la Cooperación Atlántica.
Finalmente, reiteró que el país condena el terrorismo en todas sus manifestaciones y defiende la necesidad de encontrar soluciones de financiamiento adecuadas, sostenibles y predecibles para sostener los esfuerzos globales y complementarios para combatir el terrorismo.
Subrayó que el intercambio de experiencias surgidas de esta reflexión podría contribuir a crear un entorno propicio para aumentar y fortalecer la cooperación entre las Naciones Unidas, en particular su Consejo de Seguridad, la Unión Africana y las organizaciones regionales africanas.
Esta cooperación también podrá extenderse a las modalidades de consultas diplomáticas y acciones conjuntas para prevenir y combatir el flagelo del terrorismo y el extremismo violento en África.
SC/KS