Moçâmedes - El gobernador de Namibe, Archer Mangueira, afirmó hoy, en Moçâmedes, que el primer Presidente de Angola, Agostinho Neto, dejó el país dando sus primeros pasos en el período post independencia, pero con bases para la construcción de una patria libre, democrática y empeñada en el progreso.
Su legado ha permitido que el pueblo angoleño, a lo largo de casi cinco décadas, resistir y vencer todas las vicisitudes.
Hablando en el acto provincial alusivo al Día del Héroe Nacional, que hoy se conmemora, Archer Mangueira afirmó que los angoleños han vivido, a lo largo de su historia, tiempos particularmente difíciles, de desafíos complejos, que exigen de cada uno perseverancia, coraje, sabiduría, pacificación de espíritu y confianza en un futuro cada vez más próspero.
Entre estos momentos difíciles, apuntó la guerra que duró 27 años y cegó muchas vidas humanas.
Durante este período, según el gobernador, fue necesario compaginar realidades muchas veces antagónicas, como la importancia de acabar con la guerra y la urgencia de formar cuadros calificados, capaces de administrar las comunas, los municipios, las provincias y el país.
Con la paz, alcanzada el 4 de Abril de 2002, según el gobernador, se abrió para todos los angoleños el horizonte de esperanza, y es un legado de António Agostinho Neto, “que nosotross angoleños de Cabinda a Cunene y del Mar al Este tenemos el deber de preservar”.
Subrayó que Angola tuvo el privilegio de tener en su primer Presidente una personalidad forjada en la lucha por la independencia, que fue al mismo tiempo un líder de la guerra de liberacióno, un intelectual, médico, humanista, estadista, hombre de cultura, un poeta universal y una referencia del panafricanismo y del internacionalismo.
António Agostinho Neto nació el 17 de Septiembre de 1922, en Kaxicane (Icolo e Bengo), y falleció el 10 de Septiembre de 1979, casi cuatro años después de proclamar la Independencia de Angola del entonces yugo colonial portugués, el 11 de Noviembre de 1975.