Luanda - El Jefe de Estado angoleño, João Lourenço, defendió este jueves el trabajo conjunto y la unión entre los Estados miembros de la SADC, para que la región se vuelva más pacífica, inclusiva, competitiva e industrializada.
En el acto de clausura de la 43ª Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Desarrollo de África Austral (SADC), João Lourenço afirmó que el capital humano debe jugar un papel central en la estrategia de desarrollo de la región.
El Presidente angoleño, que asumió la dirección rotativa de la organización por un año, consideró necesario que los gobiernos de los países de África Austral trabajen intensamente para el cumplimiento de las acciones contenidas en el Plan Estratégico Indicativo de Desarrollo Regional.
El Plan Estratégico de la SADC establece una agenda de desarrollo integral y sostenible en las áreas social, económica, política, de gobernabilidad y de seguridad.
Paz en la región
En cuanto a la paz, la seguridad y la estabilidad en la región, João Lourenço se refirió a la situación actual en Mozambique, que es "considerablemente más tranquila y estable", debido, en gran parte, a la entrada en acción de la Fuerza Conjunta de Alerta de la SADC.
Recordó que recientemente se prorrogó por un año más la misión del contingente presente en Mozambique, en respuesta a los resultados positivos que se han registrado.
“La estabilidad en esta zona de Mozambique será clave para que podamos dar pasos objetivos en la captación de los apoyos necesarios para la reconstrucción económica y social de la provincia de Cabo Delgado y, en consecuencia, del país”, subrayó.
En cuanto a la situación en el Este de la República Democrática del Congo (RDC), dijo que la SADC seguirá trabajando en la búsqueda de los mejores caminos hacia la paz, en estrecha coordinación y concertación con los demás mecanismos existentes para la resolución de este “ conflicto intrincado".
Saludamos, continuó el Presidente João Lourenço, la decisión sobre el despliegue de las Fuerzas de Brigadas Reforzadas de la SADC por un período de 12 meses.
Subrayó que el objetivo final es ayudar a este país hermano (RDC) a encontrar los caminos más rápidos hacia la estabilidad, contribuyendo a la pacificación total de la región.
Con respecto a Sudán, el Presidente angoleño destacó que la SADC está preocupada por la situación actual que ya provocó miles de muertos, desplazados internos, refugiados y la destrucción de muchas infraestructuras del país.
En ese contexto, los líderes de la organización hicieron un llamado a las partes en conflicto a poner fin de inmediato al uso de las armas y acordar resolver las diferencias que las separan sentándose a la mesa de negociación, con el fin de alcanzar la paz necesaria para el orden nacional. reconstrucción y desarrollo económico y social del país.
Con respecto a la situación en la región del Sahel, João Lourenço subrayó que la SADC sigue con gran preocupación los acontecimientos, con especial énfasis en el terrorismo por un lado, pero también los cambios inconstitucionales de gobiernos legítimamente elegidos por el pueblo, a través de golpes de Estado practicado por los jefes militares.
“Alentamos todos los esfuerzos de los líderes de los países miembros de la
Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (ECOWAS), con miras a restaurar el orden legal y constitucional en los países involucrados lo más rápido posible”, dijo.
Conflicto Rusia y Ucrania
El Estadista angoleño dijo que la SADC defiende la necesidad de poner fin a la guerra entre Rusia y Ucrania por las consecuencias que representa para la paz y la seguridad mundial, la seguridad alimentaria, la energía y el comercio internacional.
“Las armas deben callar y dejar paso a la diplomacia para evitar la escalada del conflicto o un posible enfrentamiento nuclear, negociando una paz que sea realmente duradera para Europa”, defendió.
Agregó que estos y otros conflictos que se desarrollan en África y en el mundo, asociados a la sequía que afecta vastas zonas de la región de la SADC, las nefastas consecuencias de la pandemia de la Covid-19 y otros factores, han sido las principales causas de la crisis actual que rodea el déficit en la producción mundial de alimentos.