Luanda - Angola manifestó, este miércoles, preocupación con la dimensión regional de la crisis en la República Centroafricana y el flujo transfronterizo de combatientes, armas y recursos naturales, por lo que alertó para “el riesgo de regionalización del conflicto”.
En una intervención en la reunión informal del Comité de Sanciones del Consejo de Seguridad (CS) de las Naciones Unidas para la República Centroafricana (RCA), la representante permanente de Angola junto de la ONU en Nueva York, embajadora Maria de Jesus Ferreira, consideró la situación actual un aspecto fundamental de la crisis en aquel país.
Anunció que los Jefes de Estado de Angola, João Lourenço, y del Congo, Denis Sassou Nguesso, en calidad de presidentes en ejercicio de la Conferencia Internacional sobre la Región de los Grandes Lagos (CIRGL) y de la Comunidad Económica de los Estados de África Central (CEEAC), respectivamente, solicitaron una reunión del CS para debatir la situación en la RCA y las consecuencias para la región, como un todo.
“Condenamos vehementemente todas las estrategias utilizadas por los grupos armados, para consolidar el control de las actividades de las minas de oro, por medio de una administración paralela ilegal que recoge impuestos de todos los operadores de este sector”, declaró.
Para la diplomática angoleña, tales recursos pueden ciertamente ser usados, como medio de financiamiento de grupos armados, en la adquisición de armas, otros equipos militares y en el reclutamiento de soldados, incluyendo mercenarios.
Observó que la mini-cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la CIRGL sobre la situación política y de seguridad em la RCA, realizada el 29 de Enero, en Luanda, alertó que las fuerzas rebeldes adquieren armas cada vez más sofisticadas y otros medios, para realizar acciones contra las poblaciones y las autoridades legítimas del país.
“También, fue anotado que las autoridades legales de la República Centroafricana tienen dificultades en asumir su misión legítima de seguridad y protección civil, debido a las obligaciones con las decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU, tomadas de acuerdo con la Resolución 2536 (2020) sobre el embargo de armas impuesto a la RCA”, dijo.
Por esta razón, Angola defiende el total levantamiento del embargo, una vez que el gobierno de la RCA es la mayor víctima, mientras que los grupos rebeldes armados continúan con acceso a armas, a través del tráfico transfronterizo que amenaza la integridad del país, según Maria de Jesus Ferreira.