Kiev - Las fuerzas rusas bombardearon la central nuclear más grande de Europa en el sur de Ucrania el jueves por la noche, donde se produjo un incendio, que fue extinguido por los bomberos.
Esta mañana, los bomberos lograron sofocar un incendio que se había desatado en la planta tras ser atacada por tropas rusas. El regulador nuclear estatal de Ucrania aseguró que los seis reactores en Zaporizhzhia no fueron afectados y que el incendio solo damnificó un edificio y un laboratorio en el sitio.
El regulador también informó que los reactores nucleares permanecen intactos y que no hubo cambios en el 'estado' de radiación, y agregó que sus especialistas están en contacto con los ingenieros de la planta nuclear.
“Los reactores permanecen intactos, hay daños en la construcción del compartimiento del reactor de la unidad de potencia #1, lo que no afecta la seguridad del reactor. Los sistemas y elementos importantes para la seguridad de la planta nuclear están en operación. No hay cambios registrados en el estado de radiación", dice el informe del regulador.
El fuego, que cubrió un área de 2.000 metros cuadrados, fue extinguido a las 06:20 hora local. La propiedad dañada se encuentra fuera de la planta, donde, según las autoridades ucranianas, los niveles de radiactividad se encuentran dentro de los límites normales. Sin embargo, el ministro de Energía de Ucrania, Herman Galuschenko, advirtió después del ataque ruso que el mundo está al borde de la mayor catástrofe nuclear en la historia del uso pacífico de la energía atómica. Galuschenko denunció que las tropas rusas utilizaron tanques, artillería y cohetes contra la central nuclear de Zaporizhzhia, "sabiendo las catastróficas consecuencias de sus acciones". La central nuclear de Zaporizhzhia es la más grande de Europa en términos de capacidad instalada. Sus seis reactores VVER-1000 tienen una capacidad de 1.000 MW. El primero entró en funcionamiento en diciembre de 1984 y el sexto en octubre de 1995.