La Habana - La participación en elecciones municipales en Cuba alcanzó el 68,58 %, el nivel más bajo desde 1976, anunció este lunes la autoridad electoral, un día después de la votación, según un informe de Televisión.
“Las elecciones se desarrollaron como estaba previsto, con tranquilidad, organización, disciplina y respeto a la ley”, dijo la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Alina Balseiro, durante una conferencia de prensa transmitida por televisión.
Según los resultados casi definitivos que dio el presidente del CNE, la participación alcanzó el 68,58%, es decir, más de 5,7 millones de votantes.
Esta es la tasa más baja desde que entró en vigor el sistema electoral en 1976.
En octubre, durante un referéndum que aprobó un nuevo Código de Familia, que autorizó, por ejemplo, el matrimonio entre personas del mismo sexo, la participación alcanzó el 74,12%, que en ese momento fue la participación más baja jamás registrada.
Este último no presentó candidaturas, pero supervisó la votación que condujo a la elección de 12.427 delegados municipales del poder popular entre unos 27.000 candidatos propuestos por los electores en votaciones al aire en asambleas barriales.
Según Alina Balseiro, el 89,11% de los votos fueron considerados válidos, sumando un 5,22% en blanco y un 5,07% nulo.
Los votantes también utilizan papeletas en blanco o papeletas marcadas con lemas antigubernamentales para expresar su oposición al gobierno.
El domingo se eligieron 11.502 delegados, y para los 925 cargos de delegados en los que ninguno de los candidatos obtuvo más del 50% de los votos, se organizará una segunda vuelta el 4 de diciembre.
Estas elecciones son la primera etapa de un mecanismo electoral que continuará con las elecciones parlamentarias en 2023 y las elecciones presidenciales a fin de año.
Los regidores electos formarán equipos municipales y propondrán, entre ellos, el 50% de los candidatos a las asambleas provinciales y al Parlamento, que elige al Consejo de Estado y al Presidente del país.
El 50% restante será postulado por organizaciones sociales cercanas al Gobierno.
En teoría, el sistema electoral permite que cualquier ciudadano cubano tenga acceso al Parlamento.